Hoy, Mateo me dijo:
Me nació algo del ombligito para ti. Se llama manchitas y es tuyo.
Manchitas es un osito
con difráz de elefante.
Cuantos de nosotros
somos unos ositos
queriendo ser elefantes.
Y no digo que no podamos serlo,
pero hay que creer que lo somos.
Hablo de que poder llegar a ser
lo que tu corazón te dicte,
quitarte esas ideas
y complejos que te hacen creer
que no puedes.
Pero no hay que caer en el egocentrismo y creer que todo
lo lograste tú, no es así.
Hay muchas personas a tu alrededor, hay un Dios, hay algo en lo que tu crees que te impulsa.
No eres tú, es un conjunto bellísimo
de tantas, tantas cosas
que no alcanzamos a ver.
Atrévete a ser un elefante sin dejar de ser lo que tú eres.
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